sábado, 16 de noviembre de 2013

Sorprendente nevada

La malla antitodo se ha derrumbado
La nevada de este sábado-16 de noviembre- es sorprendente por una doble razón: en primer lugar porque aquí en el Bajo Aragón, a 350 m. de altitud sobre el nivel del mar, es rara la nieve y más todavía a mediados de noviembre; en segundo lugar porque hace tres días íbamos en manga corta y estábamos viviendo una increíble y larguísima prolongación del verano que alguna vez tenía que acabar, pero nunca sospechamos que lo iba a hacer de manera tan brusca y contundente. Ha nevado toda la mañana y por la tarde llovía, aunque la nieve caída ha sido tanta que se ve por los tejados después de la media noche. Las consecuencias eran inevitables: rotura de ramas en muchísimos árboles (todos con hojas a pesar de la fecha) y rotura de instalaciones, invernaderos, etc. por el factor sorpresa. Eso sí, el agua es una bendición que se esperaba desde la primavera en una tierra reseca y polvorienta que ponía en peligro la siembra del cereal de la nueva temporada. Bienvenida.
Primero le daba por dentro, luego desde fuera. El invernadero se ha salvado.
Esto es el fin definitivo de tomateras, pimientos, berenjenas...pero así tiene que ser. LLegó la hora de la verdura de invierno y del invernadero, que por cierto ha estado a punto de sucumbir al peso de la nieve (el plástico está en las últimas); pero este menda, al ser sábado, estaba donde debía: dando escobazos al techo cada media hora. De momento se ha salvado con algun desperfecto

1 comentario:

  1. Preciosas fotografías.... y piensa en el dicho de las tierras de secano, "Año de nieves, año de bienes"
    Un saludo.

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