En Abril muchos caemos en la tentación de plantar antes de tiempo tomates, pimientos, berenjenas, sandías...y en definitiva todas esas hortalizas que necesitan del calor para crecer y fructificar. Las botellas de plástico de agua de cinco litros nos sirven como miniinvernaderos para salir del paso, pero otras veces plantamos a pelo confiando en que los frios no volverán. Sin embargo los frios vuelven, siempre; y año tras año se demuestra que adelantar estas tareas no sólo no sirve de nada, sino que a veces es contraproducente.
Y es que por mucho que nos empeñemos España no es el trópico y la naturaleza es insistentemente repetitiva e invariable. Yo mismo he cometido este error y lo cometo casi todos los años; por ejemplo: ya he plantado tomateras en el exterior, y sandías, y más cosas; iba el tiempo caluroso y ¡zás! de repente bajón de las temperaturas; veremos.
Los más viejos conocen perfectamente las fechas idóneas para cada cosa y obran en consecuencia, sin prisas ni ansias innecesarias.
Creo que una de las causas de que caigamos en este error es la puesta a la venta anticipada de los plantones y la confusión que se produce por el hecho de que mucha gente tiene invernaderos. Además no es lo mismo la huerta valenciana que la de la ribera del Ebro, ni el Bajo Aragón que la Meseta castellana. Cada uno que tenga en cuenta dónde vive y qué hacen ahí los que saben. Si vemos que otros se nos adelantan no pasa nada, casi seguro que si tenemos paciencia y plantamos con calor nuestras hortalizas llegarán a la vez que las de ellos y más sanas. Y evitaremos la preocupación de los frios. Un abrazo
Eso pasa por el aaannnsia viva!!
ResponderEliminarExactamente Pili, el ansia viva. Y ahora viene frio de verdad para finales de abril. Lo dicho: cada cosa en su tiempo
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